¿Cómo funciona el sistema de detección de fatiga?
¿En qué consiste el sistema de detección de fatiga? ¿Cómo funciona y cómo puede evitar accidentes? Este sistema puede ayudar a reducir los siniestros que ocurren por falta de concentración tras un trayecto de larga duración o porque el conductor no esté en condiciones óptimas para circular.
El documento ‘ADAS (Advanced Driver-Assistance Systems) Sistemmas Avanzados de Conducción’, elaborado por Fundación MAPFRE, recoge un listado importante de sistemas tecnológicos que ayudarían a evitar gran parte de los accidentes de tráfico si éstos se incorporaran en los vehículos. Entre ellos se encuentra el sistema de detección de fatiga.
Dicho sistema alerta al conductor si pierde la concentración al volante, ya sea por fatiga o sueño. De esta forma, el conductor puede detener el vehículo hasta que se encuentre en perfecto estado para seguir conduciendo.
Concretamente, el sistema analiza el patrón de comportamiento típico del conductor desde el principio de la marcha. Evalúa permanentemente durante el trayecto algunos datos como la velocidad angular del volante del vehículo. Si el sistema comprueba que las maniobras de dirección realizadas por el conductor difieren del comportamiento registrado al inicio del viaje, activa una alarma acústica, visual o sensorial, como vibración de volante o asiento.
Además, la alerta se activa tras 2 horas de conducción, sugiriendo al conductor un descanso.
En algunos casos, aunque poco frecuente, el sistema puede detectar la somnolencia del conductor utilizando una cámara dirigida hacia el conductor para la detección de las características de los ojos, la cara y la cabeza.
El dispositivo está compuesto por un sensor de ángulo de volante para analizar los micromovimientos que realiza el conductor a lo largo del trayecto, una centralita del motor para conocer el tiempo que lleva el conductor sin detener el vehículo y una consola central para ofrecer información al conductor.
El documento elaborado por Fundación MAPFRE destaca que se trata de un equipamiento que dependiendo de cada fabricante de vehículos puede ofrecerse de serie o como “pack opcional” junto con otros sistemas. Su coste varía entre los 300 y 800 euros en función de los sistemas de ayuda a la conducción que incluya el pack.
El Consejo Europeo de Seguridad en el Transporte (ETSC, European Transport Safety Council) propone que el sistema de reconocimiento de somnolencia y distracción sea obligatorio para todos los vehículos de menos de 3500 kg (excluidas motocicletas) que sean nuevos a partir de 2022.