¿Cómo incrementar tu visibilidad al volante?
Conducir en otoño o invierno supone, muchas veces, hacerlo en condiciones de escasa visibilidad. Hay menos horas de luz solar y es frecuente encontrar condiciones climáticas adversas, como lluvia, niebla o nieve. Por este motivo, ver y ser visto es más importante que nunca. No te pierdas estas recomendaciones para que la poca visibilidad no sea un problema.
Para ver mejor:
-Procurar ir por vías bien iluminadas. A la hora de conducir y elegir la mejor ruta, ten en cuenta qué vías cuentan con más luz. Por regla general, las autopistas y las autovías suelen tener una mejor iluminación que las carreteras secundarias. Hay que tener en cuenta también que el 90% del alumbrado en carreteras españolas es deficiente, según la Asociación Española de la Carretera.
-Conducir en las horas con luz solar. Si tienes que realizar un viaje largo, procura hacerlo de día. De esta forma, verás mejor y reducirás el riesgo de sufrir somnolencia o fatiga. Para la seguridad, siempre es mejor ir buscando el día que la noche.
–Comprueba que tienes las luces bien reguladas y que no hay ninguna fundida. Los coches más modernos avisan de esta incidencia en el panel de control.
En este sentido, los coches más antiguos cuentan todavía con luces halógenas. Actualmente es posible sustituirlas, en algunos casos, por luces LED. Estas luces son más eficientes y permiten ver mejor en la oscuridad, ya que proporcionan mayor iluminación y permiten ver más lejos. Además, tienen una mayor durabilidad (pueden llegar hasta las 20.000 horas de funcionamiento), y ofrecen una conducción más cómoda, es decir, la vista se cansa menos.
Hay que tener en cuenta también que una luz mal regulada, además de ofrecer una peor visibilidad, puede provocar deslumbramientos en los conductores que se acerquen de frente.
– Sentarse correctamente. Hay que nivelar adecuadamente el asiento para tener una visión amplia. Se recomienda que los ojos queden, aproximadamente, a la altura del centro del parabrisas. El respaldo debe estar ligeramente inclinado hacia atrás, para evitar dolores de espalda y cansancio, y hay que regular la altura del volante para que no reste visión hacia afuera y permita ver todo el cuadro de instrumentos. Por su parte, las piernas, al igual que los brazos deben estar ligeramente flexionadas.
– Parabrisas delantero y ventanas. El parabrisas no debe tener grietas o “picotazos” que entorpezcan la visión. Todos los cristales deben, además, estar lo más limpios posible.
– Escobillas y líquido limpiaparabrisas listos. Comprueba que las escobillas no están cuarteadas y que hacen el barrido correcto. Se recomienda su sustitución una vez al año. Revisa también el líquido del limpiabrisas, hay pocos disgustos comparables al de no tener limpiabrisas en el depósito cuando lo necesitas.
– Sistema de climatización o sistema térmico del parabrisas en funcionamiento. Los cristales se empañan cuando están fríos y hay mucha humedad en el interior del vehículo. El sistema de climatización y la calefacción son fundamentales para eliminar el vaho y, además, mantener una temperatura óptima dentro del coche. Además, algunos vehículos están equipados con un “parabrisas térmico”, que se calienta mediante una serie de resistencias que lo atraviesan, como lo hace la luneta trasera.
– Los sistemas de ayuda a la conducción ADAS son un aliado extra. Si tu vehículo cuenta con radar cámaras que te ofrecen una mayor visibilidad, úsalas. Detectores de ángulo muerto, cámaras traseras, sistema de mantenimiento del carril…, aprende a utilizar correctamente estos sistemas para una mayor seguridad.
Para ser visto:
– Evita colocarte en los puntos ciegos o ángulos muertos. De esta forma, serás más visible para el resto de usuarios. Cuanto más grande es un vehículo, más puntos ciegos posee. Autobuses, camiones o furgonetas tienen un gran número de zonas donde sus conductores tienen escasa o nula visibilidad.
– Señal V-16. Procura llevar contigo un dispositivo V-16 con conectividad y homologado por la Dirección General de Tráfico, para que en caso de siniestro o avería puedas ser más visible y localizable. Este dispositivo permite ser colocado en la parte superior del techo del vehículo sin necesidad de salir del coche. Además de ofrecer una visibilidad de 360 grados, es visible a aproximadamente 1.000 metros. Actualmente se pueden utilizar indistintamente los triángulos de emergencia o la baliza luminosa V-16. Sin embargo, su uso será obligatorio a partir de enero de 2026.
– Alumbrado. Además de los faros para ver, el sistema de alumbrado es vital para ser visto. Luces de posición, diurna, de frenado, antiniebla, marcha atrás, intermitentes…, no hay que olvidarse de ninguna de ellas, ni siquiera de la luz de la matrícula.
No restes importancia a tu visibilidad. Ver y ser visto al volante es fundamental para tu seguridad.