Riesgos de conducir con niebla
Vía y tecnología
Conducir confiado, sin luces, a velocidad normal… Cuando hay niebla la forma de conducir debe cambiar drásticamente volviéndose más precavida y respetuosa. El exceso de confianza es un riesgo que no se debe asumir, especialmente en los días de niebla donde la visibilidad se ve reducida de manera considerable incluso pudiendo no llegar a ver al vehículo que precede.
Se puede conocer en qué momento y en qué lugar va a aparecer la niebla pero en otros muchos casos puede llegar por sorpresa. Por este motivo, conviene ser precavido:
Riesgos que aparecen con la niebla:
- Reducción de la visibilidad hasta tal punto que la conducción sea desaconsejable.
- Las posibilidades de un alcance se multiplican debido precisamente a esa escasa visibilidad y a ser incapaces de percibir al vehículo que precede en los días de niebla intensa.
- El firme puede estar húmero, lo que afecta a la adherencia, que puede ser menor.
- La distancia de frenado aumenta.
- La escasa visibilidad hace que se tarde más en percibir los peligros y, por lo tanto, se reacciona más tarde.
- Hay que tener en cuenta que igual que nosotros no vemos al vehículo de delante tampoco somos vistos nosotros por el resto de usuarios.
¿Qué precauciones se deben tomar?
- Reducir la velocidad y adaptarla a las circunstancias climáticas y de la vía.
- Aumentar la distancia de seguridad.
- Se debe seguir en todo momento la línea del arcén.
- Poner las luces antiniebla. Las luces largas rebotan en las gotas de agua por lo que se deben evitar.
- Si nuestro vehículo está dotado de encendido automático de luces es conveniente situar el conmutador en modo manual, las condiciones lumínicas pueden confundir al sistema si es de día y desactivar las luces de cruce y los pilotos traseros.
- Se puede calcular la distancia respecto al vehículo de delante contando 3 segundos desde que el vehículo que nos precede pasa por un pinto fijo y hasta que llegamos nosotros.
La niebla puede impedir que se siga conduciendo. En este caso, se recomienda abandonar la vía y esperar a que se despeje la niebla. Se aconseja estacionar en una zona de descanso retirada de la carretera.