Conos conectados y geolocalizados en obras para garantizar la seguridad
Trabajar mientras que hay vehículos que circulan a tu lado a altas velocidades no es una tarea fácil. Precisamente, con el objetivo de minimizar al máximo los riesgos de esta situación e informar por todas las maneras posibles de la presencia de trabajadores al resto de usuarios de las vías, surgen los conos conectados. Y es que durante el año 2021 hubo nada menos que 156 siniestros de tráfico relacionados con personal de mantenimiento y conservación en las carreteras, de entre los cuales 19 implicaron a operarios que trabajaban o caminaban por la calzada o sus inmediaciones como peatones.
Según datos del Registro Nacional de Víctimas de Accidentes de Tráfico, en esos 19 siniestros hubo 7 operarios que sufrieron lesiones y 2 perdieron la vida arrollados por un vehículo que, o bien circulaba con una velocidad excesiva, o bien su conductor estaba distraído. Los otros 137 siniestros implicaron a operarios de conservación y mantenimiento dentro de sus vehículos.
Con el objetivo de concienciar a la población sobre los riesgos que corren estos trabajadores y trasladar la importancia de aumentar la precaución cuando hay zonas de obra, la Dirección General de Tráfico (DGT) controló durante una semana estos puntos. Los resultados son especialmente preocupantes: nada menos que 4.727 sanciones interpuestas, siendo el exceso de velocidad la infracción más cometida en estos tramos (el 73% de los conductores sancionados).
Además, se interpusieron 242 sanciones por no respetar las señales, tanto de los agentes de vigilancia del tráfico, de los operarios de obras, de las señales verticales, marcas viales, semáforos, o de cualquier otro tipo. Conducir usando el teléfono móvil también provocó que 153 conductores fueran multados en estos tramos. Le siguen no usar el cinturón de seguridad (140 sanciones), conducir bajo los efectos del alcohol (53), conducción negligente (34), no respetar la distancia de seguridad (30 sanciones), adelantamiento antirreglamentarios (24), cambios de carril no permitidos (22) y conducir con presencia de drogas (11).
CONOS GEOLOCALIZADOS PARA SER MÁS VISIBLES
El funcionamiento de estos conos es muy sencillo y a la vez práctico. Una vez los operarios han colocado y encendido los conos en la zona sobre la que están trabajando, se activa una incidencia de circulación en el centro de gestión de tráfico de la DGT y esta información es compartida en tiempo real a través de la plataforma DGT 3.0 y del “punto de acceso nacional”. De esta forma se advierte al momento y con antelación de la proximidad de obras en ejecución.
Estos conos están geolocalizados y emiten destellos luminosos, permitiendo así una mayor percepción por todos los usuarios que circulan por la vía. Los conductores disponen así de toda la información sobre la realización de obras que se van a encontrar a lo largo de su trayecto con carácter previo al paso por esa zona.
Tal y como detallan desde la DGT, el objetivo principal es aumentar la seguridad, tanto de los operarios que trabajan en la carretera, como la de los conductores que van a pasar por ese punto y que podrán recibir la información a través de los paneles de mensaje variable en carretera y en sus propios coches conectados.
El funcionamiento de estos conos queda recogido en una resolución de la DGT por la que se concreta el protocolo y el formato para el envío de datos al punto de acceso nacional.
Si circulas y ves obras, extrema la precaución. Un siniestro de estas características suele resultar fatal para quienes no tienen ningún tipo de protección como es el caso de los operarios de mantenimiento de las vías.