¿Se está consiguiendo una Movilidad 3S?
Es una realidad palpable que la forma de desplazarnos está cambiando. El objetivo primordial es el uso de modos de transporte más sostenibles como la bicicleta, el transporte público o el vehículo compartido. Además, se busca que esta movilidad sea segura, es decir, que haya el menor número de siniestros de tráfico posible y que los que se producen no sean de gravedad. Y, por supuesto, debe ser sana, ya que la contaminación acústica y atmosférica es uno de los mayores riesgos ambientales que existen para la salud. Por ello, se está apostando desde todos los niveles por políticas que fomenten una movilidad menos contaminante, como puede ser la electrificada. ¿Se puede decir que la movilidad actual cumple ya con estos objetivos?
¿La movilidad es más segura ahora? Una cosa que ha quedado clara con el paso de los años es que los siniestros de tráfico son evitables. Cuando se habla de siniestralidad vial, sin duda, ha habido un antes y un después. Hace 20 años fallecían de media 15 personas al día en carreteras españolas. El promedio diario de víctimas mortales en carretera en 2023 ha sido de 3,1 personas (últimos datos a 24 horas y en vías interurbanas). Aunque se ha ido mejorando con el paso del tiempo, todavía no ha habido un año en el que España haya bajado de 1000 fallecidos.
En el caso de los siniestros laborales viales ocurre algo similar. En el año 2022 se registraron 73.522 siniestros laborales de tráfico. De ellos, 232 fueron mortales, según datos del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSST). En 2021 fueron 65.342 siniestros laborales viales y en 2020 un total de 65.342. Por lo tanto, se puede decir que todavía queda un largo camino por recorrer para afianzar la seguridad en todos y cada uno de los desplazamientos.
Hay que señalar que los coches incorporan cada vez más sistemas de ayuda a la conducción como los conocidos ADAS. De hecho, todos los vehículos matriculados nuevos a partir del próximo 6 de julio de 2024, deberán contar, con una serie funciones de seguridad avanzadas, las denominadas ADAS, entre las que se encuentra el Asistente Inteligente de Velocidad (ISA).
Por otro lado, tanto los vehículos como las carreteras son cada vez más “inteligentes” y están más conectados, permitiendo saber en todo momento cómo se encuentra la movilidad en tiempo real. Se puede decir que el camino y el objetivo están fijados: la Unión Europea quiere reducir el número de fallecidos en la carretera a la mitad en 2030 y lograr el Objetivo Cero víctimas mortales en 2050.
¿Y son los desplazamientos más sostenibles? Con el objetivo de combatir el cambio climático en la medida de lo posible, los diferentes países están fomentando el uso de medios de transporte poco contaminantes. Así, además de la electrificación del parque de vehículos, se aboga por medios más sostenibles como la bicicleta, los vehículos de movilidad personal, el transporte público e incluso los vehículos compartidos.
Dentro de este reto de mejorar la calidad del aire, se han establecido las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), áreas en las que el acceso a determinados vehículos está restringido debido a sus emisiones. Puede ser un área amplia dentro de la ciudad, o incluso a la ciudad entera. De esta forma, sólo se permite la entrada a los vehículos que cumplan con los mejores estándares de emisiones y según su etiqueta. Sin embargo, esto puede no ser suficiente y hay que seguir mejorando la calidad de los espacios urbanos y accesos peatonales, incrementar la infraestructura ciclista, y mejorar el transporte público para que se convierta en la gran alternativa al coche privado.
Por último, ¿son los desplazamientos más sanos? La movilidad más sostenible está íntimamente ligada al mayor uso de transportes saludables como la bicicleta o los paseos a pie, que redundan en una mejor salud física y mental. Por lo tanto, se puede decir que sostenibilidad y salud caminan de la mano.
Por otro lado, la relación entre medioambiente y bienestar es innegable. La menor contaminación (tanto acústica como de gases) que emiten los vehículos híbridos o eléctricos consigue que haya una mejor calidad de vida en las ciudades. De hecho, desde la Agencia Europea de Medio Ambiente se alerta de que los riesgos medioambientales son responsables de gran parte de las enfermedades cardiovasculares, la causa más frecuente de muerte en Europa. Por lo tanto, se debe seguir trabajando para reducir la contaminación, las temperaturas extremas y otros riesgos medioambientales.
Desde Fundación MAPFRE se ha elaborado un manual con una serie de recomendaciones con las que poder descubrir en qué consiste una Movilidad 3S y cómo ponerla en práctica. La responsabilidad y la prevención son claves. No hay que olvidar que cada persona a nivel individual puede poner su granito de arena. En este artículo te damos las claves para realizar una movilidad más sostenible.