¿Debo ir vestido de alguna forma especial para conducir seguro?
Al volante no podemos ir de cualquier forma. En verano tendemos a ir con chanclas, sandalias, pantalones cortos, vestidos… En invierno solemos incluso ponernos al volante con el abrigo puesto. Debemos tener claro que conducir es una actividad para la que necesitamos libertad de movimientos. Todo aquello que nos impida movernos con facilidad o que pueda suponer un riesgo, debe ser evitado, tanto para hacer un viaje de 10 minutos como para uno de largo recorrido.
Calzado
Los pies es una de las partes del cuerpo que más controversia suele generar a la hora de indicar qué calzado es el más apropiado. Llevar zapatos con tacones impide que podamos posar el pie por completo, dificultando así nuestros movimientos a la hora de presionar uno u otro pedal.
Algo similar ocurre con las chanclas en verano. Se corre el riesgo de que se caigan, se queden enganchadas… Tampoco se aconseja conducir con calzado demasiado grande o que haga rozaduras, ya que estaremos más pendientes de él que de la conducción.
Ir descalzos tampoco es una opción. Ya que conlleva perder superficie de apoyo y sensibilidad en los pedales del coche.
Si vamos a conducir, se recomienda un calzado con suela que permita sentir los pedales. Se recomienda que sea flexible, cómodo y firme. Si es transpirable, mucho mejor, sobre todo en época de verano.
Una buena opción es llevar este calzado de repuesto en el maletero. De esta forma, no tendremos excusas.
Ropa
¿Se puede ir al volante en traje de baño? No debemos olvidar que ante un posible accidente el cinturón de seguridad puede provocarnos quemaduras o rozaduras. Además de la sensación desagradable de conducir así con el calor.
Se aconseja llevar ropa holgada para que una vez que vayamos sentados no nos oprimida. En la parte de arriba, también tendremos que llevar camisetas holgadas que no alteren el funcionamiento del cinturón de seguridad.
Llevar abrigo en invierno nos condiciona e impide realizar ciertos movimientos. Además, puede afectar directamente a la efectividad del cinturón de seguridad.
Debemos tener en cuenta que la ropa que llevamos pasa a ser como una segunda piel. En caso de que tengamos un accidente, actúe el cinturón y salte el airbag, o ante un posible impacto con el asfalto, la ropa puede ayudarnos.
Si llevamos ropa holgada en verano y en colores claros, nos aportará una mayor sensación de frescor y capacidad de movimiento.