Estos son los elementos de los SUV que más se deben revisar
Muchas son las ventajas que puede tener conducir un vehículo SUV. Por un lado, su mayor altura hace que el usuario tenga una mayor visibilidad y una mejor “sensación de seguridad” a la hora de conducir. También algunos usuarios encontrarán más fácil entrar y salir del vehículo, y también puede resultar más fácil la tarea de colocar a los más pequeños en los sistemas de retención infantil. Igualmente, suelen contar con amplios espacios para los pasajeros y maleteros más grandes, lo que puede resultar muy atractivo para familias numerosas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que hay determinados elementos que deben ser revisados con mayor asiduidad en el caso de los SUV.
Y es que como se trata de vehículos más pesados que los “tradicionales”, sobre todo cuando se trata de híbridos y eléctricos (versiones que están ganando mayor presencia en el mercado), ese incremento de peso afecta a determinados puntos vitales del vehículo:
- Los neumáticos. Pueden durar menos por ese mayor peso. Se recomienda comprobar con frecuencia su desgaste a través de los testigos insertados a lo largo de la banda de rodadura. Revisa también la presión y que no tengan bultos, cortes o están deformados.
- Los amortiguadores. También el peso de los SUV va a afectar a los amortiguadores y, por ello, se debe comprobar su estado de forma más intensiva en un taller especializado. Hay determinadas pistas que nos pueden indicar que no están en buena situación, como el desgate irregular de los neumáticos, el incremento en la distancia de frenado o pérdidas de control del vehículo en curvas, entre otros.
- Los frenos. Aunque estén diseñados para el peso concreto del vehículo pueden deteriorarse antes si se hace un uso intensivo de ellos. Practicar una conducción eficiente evitando frenazos fuertes y aumentando la distancia de seguridad alargará su vida útil. Si el vehículo es de propulsión eléctrica, aunque el desgaste sea menor, no hay que descuidar este elemento tan importante para la seguridad.
¿Sabías que los SUV pueden ser especialmente peligrosos para los peatones? Su diseño (más altos que los turismos) puede provocar graves lesiones en los usuarios vulnerables. Este es uno de los motivos por el que desde la Comisión de Transportes y Turismo de la Unión Europea se ha propuesto un nuevo permiso de conducir adicional al actual permiso B para poder conducir un SUV y vehículos comerciales de más de 1.800 kilos. Según indican, ocupan más espacio en la vía y, además, tienen más probabilidades de sufrir colisiones que los turismos ligeros, con consecuencias mucho más graves.
Por último, no hay que olvidar el resto de elementos del vehículo que deben ser comprobados y puestos a punto con periodicidad (luces, limpiaparabrisas, etc.). Un vehículo en buen estado es primordial para garantizar la seguridad durante la conducción. Se debe realizar una revisión periódica del vehículo y seguir las especificaciones del fabricante para este mantenimiento.