¿Está tu coche preparado para el frío?
Con la bajada de las temperaturas es importante tener en cuenta una serie de precauciones de cara a garantizar el buen estado del vehículo. Y es que no debemos olvidar que éste debe hacer frente a inclemencias meteorológicas tales como la lluvia, la nieve, el hielo y, por supuesto, el frío. ¡Sigue nuestros consejos para que tu coche esté listo para el invierno!
–Batería. Es uno de los elementos del vehículo que más sufre con las temperaturas extremas, tanto con el frío como con el calor. Revisa el estado de los terminales, el nivel de carga y, si puedes, procura estacionar el vehículo en un lugar cerrado para que sufra lo menos posible con las bajas temperaturas. En invierno puede ser muy útil llevar unas pinzas en el maletero para poder conectar la batería a otro vehículo si nuestro coche no arranca.
–Líquidos. Comprueba los niveles del líquido refrigerante, del aceite, del limpiaparabrisas y del líquido de frenos.
–Limpiaparabrisas. Puede que no le demos la importancia que merecen, pero son fundamentales para garantizar la seguridad, ya que se encargan de eliminar el agua o la suciedad que pueda haber en el parabrisas y permitir una correcta visión. Revisa que están en buen estado y que hacen un barrido óptimo. Si dejas el coche estacionado en la calle cuando hay heladas, procura que no estén en contacto directo con el cristal, para que no se queden pegados por el frío.
–Neumáticos. Son el único nexo de unión entre el coche y la carretera. Revisa que están en buenas condiciones, que no presentan cortes o deformaciones, y que no están desgastados ya que, en este caso, pierden agarre o adherencia, sobre todo en mojado. Recuerda que la profundidad del dibujo de la banda de rodadura no debe ser inferior a 1,6 mm, aunque se recomienda que no esté por debajo de 3 mm. Revisa también que llevan la presión correcta.
–Luces. Durante esta época del año hay menos horas de luz solar, por lo que tener las luces en perfecto funcionamiento es vital para garantizar que vemos y que somos vistos. Igualmente, son fundamentales con lluvia, nieve o niebla.
–Frenos. Revisa que actúan de manera correcta. Ante cualquier signo de mal funcionamiento debes llevar el coche a un servicio técnico especializado, para que allí comprueben el sistema de frenado en general (discos, pastillas, bomba, líquido, etc.).
–Vehículo equipado. ¿Llevas todo lo necesario en caso de emergencia? Si vas a hacer un viaje largo por zonas muy frías te recomendamos llevar en el maletero un botiquín de primeros auxilios, agua, algo de comida, una manta, un rascador por si hay hielo en los cristales, cadenas de nieve (si no tienes neumáticos de invierno o “todo tiempo”). Por supuesto, se recomienda viajar siempre con un teléfono móvil y un cargador para poder comunicarnos con los servicios de emergencia en caso de ser necesario.
Revisa tu vehículo con periodicidad para comprobar que efectivamente está en buen estado para circular. No pongas en riesgo tu seguridad ni la de los tuyos.