Aumentan los incidentes con patinetes eléctricos
Los últimos días hemos visto cómo han aparecido noticias relacionadas con el incendio de patinetes eléctricos o con atropellos a peatones. Los vehículos de movilidad personal (VMP) están teniendo un gran auge, por lo que conviene recordar una serie de recomendaciones que los usuarios de estos vehículos deben seguir para evitar incidentes y siniestros de ese tipo.
Uno de los sucesos más llamativos tenía lugar el pasado 14 de marzo, cuando dos personas resultaron intoxicadas por inhalación de humo al incendiarse un patinete eléctrico mientras se cargaba. Según los primeros indicios, todo se debe a un cortocircuito que originó un incendio en el cableado de la batería del vehículo.
Hay que señalar que una de las principales recomendaciones para evitar este tipo de incidentes es no cargar los patinetes eléctricos durante la noche en viviendas. Además, es importante señalar que no se deben manipular bajo ningún concepto los vehículos de movilidad personal, ya que instalar baterías adicionales puede suponer un gran riesgo y provocar incendios como el que se ha mencionado. En este caso, se observa además que se ha producido una manipulación del patinete, concretamente del cableado. Es importante remarcar que sólo un servicio técnico especializado o profesionales cualificados deben reparar o manipular los patinetes eléctricos. En todo caso, no se deben utilizar recambios o dispositivos que no estén homologados y que no cuenten con la recomendación del fabricante.
Tal y como recoge el estudio ‘Pruebas de choque (crash-tests) de patinetes eléctricos y riesgos asociados a su proceso de recarga: recomendaciones para un uso seguro’, realizado por Fundación MAPFRE, en colaboración con CESVIMAP, la batería es el elemento que más problemas puede ocasionar en un VMP, especialmente durante la carga.
El estudio ha analizado multitud de incendios en patinetes eléctricos, y entre las conclusiones se destaca que la mayoría de esos sucesos tienen lugar por un problema de la batería que, en la mayoría de los casos, se originó durante la carga. Como consecuencia, en algunas ocasiones se produjo una explosión.
La mayoría de estas baterías son de Ion-Li, y suelen disponer de una protección fusible en cada celda contra cortocircuitos y altas temperaturas. El BMS (Battery Management System) es clave para evitarlo, ya que controla el proceso de conexión y desconexión; se puede decir que es el componente más importante que se encarga de la seguridad eléctrica del patinete.
Si el patinete careciera de BMS, se podrían llegar a producir incendios durante la carga, debido a que en caso de subidas de tensión el BMS es lo que evita que esto afecte a las celdas de la batería.
Para evitar estos incidentes de sobrecalentamientos y cortocircuitos nunca se debe manipular el controlador de velocidad o la potencia, algo que por desgracia se está volviendo muy frecuente debido a la existencia de distintas apps no oficiales que anulan los controladores del VMP, y de videos que explican cómo manipular las baterías y los módulos de control. De hecho, las imágenes mostradas por los medios de comunicación muestran que el patinete incendiado en Valladolid había sido previamente manipulado con una extensión de batería.
Además, se ha de insistir en que no se debe cargar el patinete cuando está mojado, después de un golpe que haya afectado la zona de las baterías, o por la noche sin supervisión. Además, el cargador debe ser el recomendado por el fabricante.
Se aconseja realizar la carga en lugares apartados donde no haya objetos inflamables o que puedan arder con facilidad para que, en caso de que se produzca el incendio, el fuego no se propague por la vivienda. También se aconseja evitar dejar cargando el VMP una vez este haya llegado a su nivel máximo de carga, ya que el cargador se mantiene a una temperatura muy elevada mientras está enchufado.
Por otro lado, hay que prestar especial atención a los atropellos ocurridos recientemente en diversas ciudades españolas. Como ejemplo, un usuario de patinete eléctrico se daba a la fuga tras atropellar a una anciana de 79 años de edad. La mujer sufrió un traumatismo craneoencefálico severo y tuvo que ser intubada. Ambos usuarios se encontraban en un carril bici y, lamentablemente, falleció a los pocos días.
Aunque en un primer momento se pueda pensar que el riesgo es menor en un atropello con un patinete eléctrico, las secuelas pueden ser especialmente preocupantes, tal y como se recoge en el mencionado estudio. Chocar a 25 km/h con un patinete eléctrico, velocidad máxima a la que pueden circular, puede producir lesiones graves a conductores y peatones.
Un crash test realizado por Fundación MAPFRE y CESVIMAP entre un patinete eléctrico y un peatón que simula un niño ha demostrado cómo el usuario del patinete apenas sufre secuelas, mientras que el peatón, que es arrollado por el VMP, tiene daños serios en rodillas, tórax, y cabeza, que suele impactar primero y de forma violenta contra la columna de dirección del patinete, y después, contra el suelo. El impacto también afecta a los hombros, donde recae la masa del conductor y del propio patinete en el momento de impactar contra el asfalto.
En este sentido y con el objetivo de evitar este tipo de atropellos, se insiste en la importancia de no invadir la zona por la que circulan los peatones, es decir las aceras, y bajarse del patinete cuando se vaya a cruzar por un paso de peatones. Tampoco se debe utilizar el pie sobre la calzada como freno, por el elevado riesgo de sufrir una fractura.
Otro factor determinante para evitar siniestros es llevar chalecos reflectantes y no utilizar dispositivos para escuchar música. Además, se recomienda usar el casco siempre, ya que es fundamental para minimizar las consecuencias de los golpes que sufre el conductor del patinete cuando se cae y choca contra el suelo o contra un elemento fijo o móvil.
Uno de los hechos más llamativos del incidente ocurrido en Madrid es que el usuario del patinete abandonó el lugar del siniestro dejando allí a la víctima gravemente herida, lo que podría considerarse como un delito de omisión del deber de socorro.