Prevención vial
Los accidentes de tráfico históricamente eran considerados sucesos eventuales o aleatorios que ocurrían como consecuencia inevitable del transporte.
El mismo término de accidente puede dar la impresión que es un suceso imposible de controlar.
Accidentes viales – Cómo evitarlos con la prevención
Los accidentes viales se cobran la vida de miles de personas a lo largo de un solo año, por este motivo suponen un gran problema y tanto la sociedad como los países deben ponerle solución, ya que aunque originariamente se creyese que los accidentes era algo inevitable, lo cierto es que en cierta medida pueden ser controlados y evitados a través de la prevención vial.
Muchas instituciones educativas como La Dirección General de Tráfico (DGT) y el Instituto de Seguridad Vial de Fundación MAPFRE, luchan por la prevención y seguridad vial, aunque ésta se haya convertido en todo un desafío.
Los factores involucrados en un accidente de tráfico son: factor humano, mecánico y del entorno. Por este motivo dentro de la prevención vial encontramos los cinturones de seguridad, los sistemas de retención infantil, mejoras en los componentes de neumáticos, chasis, el asfalto, la señalización en las carreteras…
Todos estos factores sumados a las investigaciones y estudios elaborados sobre esta materia ha permitido abordar el fenómeno de los accidentes de tráfico y conseguir que año tras año se reduzcan los accidentes.
Prevención vial – La formación como elemento de principal
Aunque los accidentes descienden a lo largo de los años, teniendo cifras muy inferiores a las cotejadas hace una década, lo cierto es que también es necesario extremar las medidas de prevención vial a través de la educación ya que el factor humano está presente en los accidentes. La formación en Seguridad Vial ha hecho posible que durante estos años los accidentes de tráfico descendiesen considerablemente y es el camino que se debe seguir.
La formación es un paso importante para la prevención, ya que se pasa del conocimiento a la concienciación. Esto se traduce en que cada uno de nosotros toma consciencia de los riesgos que comporta conducir un vehículo, ser pasajero o caminar por la calzada.