Consejos a los taxistas para evitar accidentes de tráfico
Más de un millón de personas trabajan en la industria del taxi en Europa, es decir, el 8% de los empleos en el sector del transporte europeo. En la mayoría se trata de conductores autónomos propietarios de su propia empresa. Muchas horas el volante, viajes constantes, tráfico… Conducir un taxi no es una tarea fácil. De ahí, la importancia de evitar accidentes en la medida de lo posible.
El informe PRAISE ‘Taxis más seguros. Gestión de los riesgos para taxistas, pasajeros y los demás usuarios de las carreteras’, elaborado por el Consejo Europeo de Seguridad en el Transporte (European Transport Safety Council, ETSC), con el apoyo de Fundación MAPFRE, nos ofrece una serie de recomendaciones dirigidas especialmente a los conductores de taxis para evitar accidentes.
- No conducir de manera continuada durante más de 2 horas sin un descanso de 15 minutos. De esta forma, evitaremos la aparición de la fatiga y la somnolencia. Hay que tener en cuenta que el mayor riesgo de colisión se produce por la noche, en jornadas laborales prolongadas e irregulares.
- -Evita el estrés, especialmente al volante. Se debe adoptar una actitud relajada pero concentrada, planificar los trayectos, evitar las congestiones, las prisas…
- Siempre con el cinturón de seguridad. En España, los taxistas pueden ir sin cinturón en zona urbana cuando están de servicio. Asimismo, cuando circulan en tráfico urbano o áreas urbanas de grandes ciudades, pueden transportar a personas cuya estatura no alcance los 135 centímetros sin utilizar un dispositivo de retención homologado adaptado a su talla y a su peso, siempre que ocupen un asiento trasero. Aunque la norma lo permita, el cinturón de seguridad se debe llevar siempre, tanto el conductor como el resto de pasajeros. Por supuesto, lo ideal sería que los niños también fueran con sistema de retención infantil.
- La velocidad es uno de los factores más presentes en los accidentes de tráfico graves y la causa principal de las colisiones. No podemos dejar que la presión por recoger a pasajeros o la presión del cliente para llegar a su destino nos lleve a ir más rápido. Siempre se deben respetar los límites máximos de velocidad establecidos para las distintas vías y reducir la velocidad en condiciones climatológicas adversas como puede ser lluvia, nieve, niebla…
- Cero alcohol, drogas y/o medicamentos al volante. Precisamente muchos conductores recurren a los taxistas confiando en sus cualidades para conducir. Los taxistas deben alentar la no conducción después del consumo de estas sustancias.
- La distracción al volante es un factor difícil de controlar cuando se llevan muchas horas conduciendo o se utilizan sistemas como el GPS. Las empresas gestoras de flotas de taxis deben identificar y gestionar todas las distracciones vinculadas a la conducción en el trabajo y asegurarse de que los conductores reducen los riesgos. Hay que tener en cuenta que los taxistas pueden recibir las solicitudes de carreras a través de sus teléfonos móviles, lo que puede llevar a provocar distracciones. Lo ideal sería recibir toda esta información a través del manos libres.