¿Es necesario refrescar conocimientos tras años al volante?
¿Sabes cómo es la señal que prohíbe el acceso a los vehículos de movilidad personal (VMP)? ¿Y cómo es la que prohíbe la circulación a vehículos en función de su distintivo ambiental? Son algunas de las nuevas señales que se van implantando de manera paulatina en las carreteras españolas. Es un ejemplo de cómo la normativa de circulación cambia a lo largo de los años. A estos cambios legislativos hay que sumar la cada vez mayor presencia de usuarios vulnerables como ciclistas o conductores de patinetes eléctricos. Por supuesto, los vehículos también están en continuo proceso de cambio con cada vez más sistemas de ayuda a la conducción (ADAS) y con una clara apuesta por los vehículos híbridos y eléctricos. ¿Estás al tanto de todos estos cambios? Refrescar conocimientos resulta primordial.
A los muchos cambios que se producen en la circulación y su normativa hay que sumar que, con el paso de los años, se adquieren conductas o comportamientos que pueden resultar peligrosos al volante como, por ejemplo, conducir con un brazo apoyado en la ventanilla y una sola mano al volante, no mirar adecuadamente por espejos o ir con la vestimenta inadecuada. Además, tras años conduciendo, es normal olvidar el significado de, por ejemplo, aquellas señales de tráfico menos frecuentes, no conocer exactamente todos los límites máximos de velocidad, o desconocer qué dice la normativa de circulación sobre la preferencia de paso en determinadas ocasiones. ¿Te sientes identificado? No resulta nada extraño, ya que sólo cuatro de cada diez conductores están convencidos de que aprobarían el examen teórico de conducir si tuvieran que volver a hacerlo, según un estudio realizado por Northgate.
Refrescar conocimientos para conducir es fundamental, sobre todo en el caso de los conductores profesionales. Por este motivo se creó el certificado de aptitud profesional (CAP), para acreditar que los conductores de camiones y furgonetas de más de 3.500 kg de masa máxima autorizada cuenten con las aptitudes y conocimientos necesarios para conducir ese tipo de vehículos.
Sin embargo, hoy en día hay otros conductores profesionales, como repartidores o conductores de vehículos de transporte de personas (VTC), que no se ven sometidos a esta obligatoriedad. Por ello, es primordial que desde las diferentes empresas, ya sean grandes o pequeñas, se fomente esta renovación de conocimientos. Y ya no sólo hablamos de conductores que pasan toda su jornada laboral en la carretera, sino también de aquellos que sólo usan el vehículo para ir y volver del trabajo. No hay que olvidar que buena parte de los siniestros laborales de tráfico tienen lugar precisamente en los trayectos in itinere. Concretamente, el 68,7% de los producidos en 2022, según el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSS).
En este sentido, realizar cursos para refrescar conocimientos resulta fundamental y debería ser una máxima en muchas empresas. Ya no sólo para conocer la nueva normativa de tráfico, algo muy importante, sino también para aprender técnicas de conducción eficiente, conocer las peculiaridades del resto de usuarios de las vías, profundizar en los principales factores de riesgo, o saber cómo actuar correctamente en caso de una emergencia o siniestro de tráfico. Estos cursos no sólo ayudan a ser un conductor más seguro, también a ser usuarios más respetuosos y responsables.
Y no es necesario esperar muchos años para actualizar los conocimientos al volante. Como se ha visto anteriormente, de un año a otro se pueden producir cambios importantes en la normativa que obligan a realizar un refresco. En cuestión de meses también se pueden interiorizar comportamientos inadecuados en la conducción que pueden poner en riesgo la seguridad.
En este sentido, Fundación MAPFRE ofrece una nueva plataforma adaptada a las necesidades de cada trabajador y empresa. De esta forma, se consigue que sea una formación efectiva y de interés. En total, son 6 cursos diferentes que cuentan con temas de interés común que van dirigidos a todos los usuarios, y otros específicos para motoristas, ciclistas o peatones. Se pueden hacer todos los cursos o sólo aquellos relacionados con la actividad que realiza el trabajador, pero siempre de forma totalmente gratuita.
Basta con registrar a tu empresa para que tus trabajadores puedan realizar los cursos que necesiten.