Refrigerios de verano… ¿también afectan al volante?
Con la llegada del verano, muchas son las personas que aprovechan este buen tiempo para disfrutar en la terraza con amigos. El consumo de bebidas como sangrías, cervezas o tintos de verano se debe realizar con la máxima precaución, evitando en todo momento el alcohol si se va a conducir.
Y es que hay que tener en cuenta que tanto la sangría como el tinto de verano tienen alcohol. De la constitución y tolerancia, entre otros muchos factores, dependerá que se dé positivo o no en un control de alcoholemia después de su consumo. Recordamos que actualmente la tasa de alcohol no debe sobrepasar los 0,5 gramos por litro en sangre o los 0,25 miligramos por litro en aire espirado. Por supuesto, la mejor tasa al volante es la 0,0.
En el caso de los conductores profesionales o noveles la tasa permitida es menor: 0,3 gramos por litro en sangre y 0,15 miligramos por litro en aire espirado. Alcanzar estos niveles es relativamente sencillo. Por ello, lo mejor es no correr riesgos.
Y es que un vaso y medio de cerveza o una copa puede ser suficiente para dar positivo, teniendo como ejemplo un hombre de complexión media. Por supuesto, esto va a varias en función de si eres hombre y mujer, la tolerancia, el peso… En el caso de una mujer puede bastar una cerveza o media copa de vino.
Hay que tener en cuenta que aunque dos personas beban exactamente la misma cantidad de alcohol, probablemente no tengan la misma cantidad de alcohol ni en sangre ni en aire. Incluso, si una misma persona toma el mismo alcohol en dos días distintos, la tasa puede ser completamente distinta.
Por este motivo, si después se va a conducir, conviene tener en cuenta este hecho y evitar el consumo de cualquier bebida con alcohol. Hay que tener en cuenta que actualmente se pueden adquirir muchas de estas bebidas sin alcohol o que hay otras muchas otras alternativas que no afectan a la capacidad para conducir, permitiendo ponerse al volante sin problemas y con total seguridad.