Seguridad Vial en bicicleta
La bicicleta es un medio de transporte que da al usuario muchísima libertad. Es unmedio de transporte barato, rápido y eficiente. Además contribuye a mejorar el medioambiente y reduce los impactos de movilidad. Por otra parte, el usuario de la bicicleta es especialmente vulnerable en caso de caída o atropello y circular sin la debida precaución y responsabilidad puede llegar a ser peligroso. Desde Fundación MAPFRE queremos mostrar las claves para que la coexistencia entre ciclistas, peatones y otros medios de transporte sea solidaria y segura.
Para conducir seguro en bici, lo primero y más importante es hacerse visible y protegerse de los vehículos de motor.
- Luces reflectantes: Con malas condiciones meteorológicas o de noche , la visibilidad se reduce enormemente. Por ello es de vital importancia la utilización de luces y reflectantes. La normativa obliga a circular con las luces delantera y trasera encendida, además de materiales reflectantes a más de 150m.
- Timbre: El ciclista, no solo debe hacerse ver mediante efectos visuales, también debería hacerse oír. La normativa vigente también obliga al usuario a utilizar el timbre.
Por último, no solo es importante que otros conductores y peatones vean y oigan al ciclista, el ciclista también debe ir alerta y con todos los sentidos puestos en la conducción y escuchar lo que pasa a su alrededor, por lo que no deben utilizarse auriculares.
Comprobar el buen funcionamiento de la bicicleta
Antes de salir a la calle, es importante revisar bien la bici. Comprobar que los frenos funcionan correctamente, que la presión de los neumáticos sea la correcta y que el sillín y el manillar estén firmemente fijados.
Al circular por el carril bici
Es de vital importancia respetar el sentido único de aquellos bicicarriles que así lo dispongan. En aquellos que sean de doble sentido, se debe circular por el lado derecho, y adelantar por el izquierdo.
Es muy frecuente que por los carriles bici también pasen los peatones, por lo que se debe alertar a estos con el timbre si fuera necesario. Además, se debe tener especial cuidado y reducir la velocidad en zonas próximas a colegios o parques, ya que suele haber zonas peatonales y de bajada de de viajeros de transportes colectivos donde el peatón siempre tiene preferencia frente al ciclista .
Por último, es importante respetar las señales de tráfico correspondientes. Aunque los ciclistas que circulan por sus carriles bici tienen prioridad de paso sobre los vehículos con motor siempre que sus trayectorias se corten, de todas maneras, se deben respetar estas señales y asegurarse de que los vehículos también las respetan.
Zonas peatonales
Del mismo modo que los coches pueden constituir una amenaza para los ciclistas, las bicicletas también pueden resultar peligrosas para los peatones. No solo se trata de auto protegerse de los vehículos cuando se va en bici, sino también de respetar al resto de ciudadanos; por ello, en las zonas peatonales, se debe ir con los cuatro sentidos puestos.
En las zonas peatonales, los peatones siempre tienen preferencia frente a los ciclistas. Por ello, en zonas peatonales debe reducirse la velocidad, hasta el punto de bajarse de la bici si fuera necesario, evitando intimidar a los peatones cuando haya grandes aglomeraciones.
Cuando sea preciso, es preferible cruzar por los pasos de peatones a pie por el mismo motivo, así como alejarse del área próxima a portales y garajes.
En la calzada
En la carretera se cambian las tornas, y del mismo modo que los automovilistas deben prestar atención y tener cuidado con las bicicletas, los ciclistas también deben ir atentos a los coches. Los ciclistas deben de ir por la parte más alejada del tráfico motorizado partiendo desde el arcén pudiendo ocupar la calzada para realizar giros. Además, los ciclistas no deberán circular nunca por el carril bus.
Se debe respetar la señalización, igual que si uno se desplazase en un vehículo de motor. Así mismo también existe una distancia de seguridad para los ciclistas, de un mínimo de 1,50 m respecto a los vehículos aparcados o aquellos que se adelanten; la distancia de seguridad debe ser respetada tanto por los conductores de vehículos a motor como por los ciclistas. En el caso de adelantamientos el ciclista debe señalizar adecuadamente la maniobra correspondiente con los brazos.
Como anteriormente se apuntó, no se debe olvidar en ningún momento ir con todos los sentidos alerta, evitando situarse en los ángulos o puntos muertos de los espejos retrovisores de los coches, camiones, autobuses, motocicletas…
Desde Fundación MAPFRE esperamos que estos consejos sean de utilidad y los tengáis en cuenta a la hora de utilizar la vía como ciclistas. También os recomendamos dar de alta vuestra bicicleta en el registro voluntario de bicicletas del Ayuntamiento por si hay algún tipo de problema, robo o pérdida, aunque no te olvides de utilizar siempre un buen candado.