Trabajos con horarios atípicos, la importancia del descanso
La Encuesta Nacional de Condiciones de Trabajo 6ª EWCS de España ofrece los datos de 43.850 trabajadores entrevistados, 3.364 en España. Con ellos se han abordado aspectos como la situación del empleo, el horario de trabajo, la organización del trabajo, el equilibro entre la vida laboral y la vida personal, el lugar del trabajo, la salud, el bienestar… Por supuesto, uno de los temas más llamativos es, sin duda, los horarios atípicos, es decir, aquellos que no cuentan con un horario considerado ‘normal’ dentro de la jornada laboral.
Nada menos que el 53% afirma trabajar en sábados mientras que el 32% en domingo. Además, hay que destacar que el 27& de los encuestados asegura trabajar una jornada diaria de más de 10 horas y el 21% afirma tener un horario nocturno.
Los jóvenes son los que más trabajan por la noche, los domingos y los sábados. También, los trabajadores de edad intermedia trabajan con más frecuencia por la noche, más que los mayores, y desarrollan jornadas diarias de más de 10 horas de manera habitual.
Son precisamente los trabajadores con contrato temporal los que más trabajan los sábados.
Las actividades económicas que destacan porque los trabajadores realizan horarios atípicos en mayor proporción son: Salud, Transporte, Agricultura, Comercio y hostelería y Actividades administrativas, auxiliares y financieras.
En lo que respecta a la ocupación, destacan especialmente los Operadores de instalaciones y maquinaria, los Trabajadores de servicios y vendedores, los Directores y gerentes, así como los Trabajadores cualificados del sector agrario.
Horarios atípicos y conducción
Conducir después de haber trabajado un sábado o un domingo no tiene ningún riesgo. Sin embargo, si se trabaja durante estos días después de una semana laboral intensa puede conllevar que el cansancio acumulado merme nuestra capacidad de atención y de reacción. El cuerpo humano necesita descansar. De ahí la importancia de no trabajar durante muchos días seguidos y de realizar periodos de descansos entre ellos.
Conducir después de una jornada de 10 horas o más, así como después de haber realizado una semana laboral por turnos también afecta directamente a nuestro cansancio y ciclo de sueño.
No podemos olvidar que tras 11 horas de trabajo, el riesgo de estar involucrado en una colisión se duplica. Tal y como recoge el informe ‘PRAISE: “Vencer la fatiga” – Normas sociales de la UE y conductores de vehículos pesados’, realizado por el Consejo Europeo de Seguridad en el Transporte (European Transport Safety Council, ETSC), una persona que conduce tras haber permanecido despierta durante 17 horas corre un riesgo de colisión equivalente a tener un nivel de alcohol en sangre del 0,5 g/l (el doble del riesgo normal).